Fragmento
de
los
esgrafiados del
presbiterio de Santa Marina
restaurados
por
Don Carles Arola
el
año
2001
|
EL
ESGRAFIADO
Se
realiza
con
los
mismos
materiales
que
el
fresco,
pero
el
pigmento
se
mezcla
en
el
mortero.
Es
a
base
de
colores
planos,
y
a
diferentes
niveles.
Es
más
para
soluciones
decorativas.
El
proceso
consiste
en
extender
un
primer
rebozado,
generalmente
el
de
tono
más
oscuro,
se
deja
fratasado
y,
una
vez
seco,
pasado
un
día,
se
extiende
otra
capa
fina
del
mismo
color.
Seguidamente
y
aún
tierno,
se
extiende
el
mortero
del
otro
tono,
normalmente
un
color
muy
claro
y
del
grosor
conveniente.
Se
pueden
dar
dos
capas
y
generalmente
se
deja
uniformemente
fino.
Al
cabo
de
unas
horas,
cuando
el
material
lo
permite,
se
estarce
un
dibujo
encima
y
con
la
ayuda
de
un
estilete
se
corta
el
dibujo
y
se
hace
caer
donde
convenga
la
capa
superior,
llamada
contra-trepa
apareciendo
debajo
el
color
de
la
primera
capa
llamada
trepa. |