Establecimiento
comercial
de
género
textil
de
mucho
renombre.
Los
frescos
decoran,
utilizando
el
trampantojo,
un
espacio
del
establecimiento
dedicado
a
los
géneros
textiles
propios
del
carnaval
y
del
espectáculo.
Así,
encontramos
arlequines,
bailarinas,
máscaras
y
músicos
y,
bajo
la
escalera,
el
gato
juega
con
un
ovillo
de
lana
entre
la
máquina
de
coser,
marca
Arola,
y
el
viejo
maniquí
de
la
modista.